Laguna Honda

Magnífico criadero de tencas y ranas, donde abundan los patos y otras aves, que hacen de sus aguas y carrizales su habitat natural.

La laguna tiene una extensión considerable: 1.885 m de perímetro, 600 m de diámetro y más de 5 m de profundidad. Estas medidas hacen de ella una importante reserva hídrica, donde ganados de ovejas y otros animales pueden calmar su sed.

Phragmites australis (juncos o carrizos) y Polygonum amphibium (berras) son las plantas dominantes. Tábanos y mosquitos ávidos de sangre, surcan el aire en busca de una presa descuidada, pero algunas veces, un certero manotazo da con ellos en el suelo, ¡¡¡cabrón!!! la marca ya te la ha dejado.

Algunos jóvenes se entretienen pescando.
La espera de la ansiada presa en ocasiones es larga, pero se lleva bien con una cerveza, un cigarrillo y si se tercia, una partida de cartas.
Últimamente el uso de la canoa, ha tomado auge entre los jóvenes campillanos. Deporte muy completo y divertido que unido con un buen chapuzón ayuda a mitigar los rigores del verano.
Con el atardecer, el día llega a su fin. Las aves se escabullen entre los juncos y las ranas afinan sus voces para salir de ronda.

La noche será corta, como corresponde a los meses de verano, pero un millar de estrellas, contemplarán estas aguas serenas, que durante cientos de años, han sido criadero de tencas y ranas.